Magnate


Es la primera vez que un latinoamericano, Carlos Slim, ocupa el primer puesto del ranking de Forbes, desbancando al sempiterno Bill Gates. Y no sólo eso: también hay dos fortunas indias y una brasileña entre los ocho primeros puestos, confirmando la irrupción de las economías emergentes en el panorama internacional.

El mexicano Carlos Slim, hijo de emigrantes libaneses llegados en México en 1902 sin saber una palabra de español, es el más rico del mundo. Magnate del emporio Telemex (telefonía fija) y Telcel (móvil), su fortuna asciende a 55 billones de dólares. Tan sólo 500 millones de dólares separan al segundo hombre más rico del pódium: William Gates II (Bill Gates), presidente de Microsoft, atesora la nada desdeñable cifra de 50 billones de dólares. Conocido por destinar gran parte de su capital a obras sociales, Gates ocupaba la primera posición durante muchos años, lo que no quiere decir que tenga menos dinero ya que su capital se ha incrementado en 13.000 millones.

Al conocido filántropo le sigue otro generoso empresario, Warren Buffet. El denominado Oráculo de Omaha por su buen ojo para los negocios, es uno de los mayores inversionistas del mundo y el principal accionista de Berkshire Hathaway. Su fortuna asciende a 47 billones de dólares.

Si los anteriores patrimonios se concentran en el continente americano los dos siguientes basculan hacia el otro lado del planeta: Mukesh Ambani, con 30 billones de dólares y Lakshmi Mittal, con 29, ambos de origen indio, son los siguientes en la clasificación. Ambani, de 56 años, cuenta, entre otras, con una residencia de 27 plantas en Bombay, es el mayor millonario de India gracias a Reliance Natural Ressources, compañía que opera en el sector del petróleo y del gas. Le sigue su compatriota afincado en Londres, Lakshmi Mittal (29 billones), al frente de la mayor productora de acera del mundo, Arcelor Mittal, empresa que hace tan sólo dos décadas era prácticamente desconocida en el resto de los mercados.

Tras estos capitales generados con fuentes energéticas y materias primas la tecnología aparece, otra vez, como fuente de riqueza: el americano Lawrence Ellison es el sexto más rico del planeta, con 28 billones de dólares. Ellison, que nunca terminó sus estudios universitarios y fue criado por sus tíos en un suburbio de Chicago, fundó la firma de software Oracle. Este tiburón de los negocios es conocido por sus excéntricos gustos: dispone, por ejemplo, del tercer megayate más grande del mundo, amén de una amplia colección de deportivos y de un avión de combate.

La marca Louis Vuitton Moët Hennessy, LVMH, es sinónimo de lujo, no en vano, el propietario de este conglomerado empresarial, Bernard Arnault, es el francés más rico ocupando la séptima posición del ranking mundial, con un capital de 28 billones de dólares. Amante del arte, más de la mitad de los empleados de su conglomerado empresarial no habla la lengua de Rousseau.

Para terminar, el español Amancio Ortega, el español más rico del mundo, ocupa una posición de lujo gracias a Zara, su imperio del textil.